- El ring de la Ariake Arena fue testigo de una noche inolvidable, donde el boxeo volvió a demostrar por qué es un deporte lleno de emociones y sorpresas.
Ciudad de México.- En una noche llena de emociones y golpes contundentes, el japonés Junto Nakatani demostró por qué es considerado uno de los mejores libra por libra del mundo al noquear al valiente mexicano David 'El General' Cuéllar en el cuarto round. El combate, celebrado en la Ariake Arena de Tokio, dejó en claro la calidad del monarca WBC, quien con un zurdazo devastador envió al tapiz al invicto queretano y forzó la intervención del réferi Michael Griffin para detener la pelea.
Desde el primer round, el duelo prometía ser una batalla épica. Cuéllar, con su estilo agresivo y contragolpeador, buscó aprovechar las pequeñas fallas del campeón, mientras Nakatani, desde su guardia zurda, desplegaba una técnica impecable y golpes precisos. Sin embargo, el tercer round marcó un punto de inflexión: un potente golpe de izquierda de Nakatani mandó a Cuéllar a la lona, quien, con gran corazón, se levantó para continuar la pelea.
Pero el japonés no se detuvo. En el cuarto round, otro zurdazo certero conectó en el rostro del mexicano, dejándolo sin capacidad de respuesta y obligando al réferi a detener el combate. Con este resultado, Nakatani mantuvo su invicto y retuvo el título gallo WBC, mientras que Cuéllar sufrió la primera derrota de su carrera.
A pesar de la caída, el queretano dejó en claro su valentía y capacidad para enfrentarse a lo más alto del boxeo mundial. Por su parte, Nakatani consolidó su legado como uno de los mejores de la actualidad. El ring de la Ariake Arena fue testigo de una noche inolvidable, donde el boxeo volvió a demostrar por qué es un deporte lleno de emociones y sorpresas.
